Disfrute de esa gran escapada de fin de semana incluso mientras paga facturas mensuales, préstamos estudiantiles y otras obligaciones financieras. Al modificar la forma en que ahorra (y piensa sobre los ahorros), los pequeños cambios pueden sumar rápidamente.
Aquí le presentamos cinco estrategias que pueden ayudarle a optimizar su cuenta bancaria, ahorrar según un cronograma y estar más cerca de lograr su objetivo.
1. Ahorre de a poco para una meta que pueda visualizar
Supongamos que quiere comprar un smartphone nuevo y cuesta $1,200. Steve Repak, un planificador financiero certificado, orador de educación financiera y autor de Dollars & Uncommon Sense: Basic Training for Your Money, sugiere, «En vez de decir: "Voy a pagarlo", es más razonable descomponer ese precio y separar $100 todos los meses. (A menudo) vemos el resultado final sin decir, "Hagamos esto de a poco"», comenta.
Keith Klein, un planificador financiero certificado y dueño de Turning Pointe Wealth Management en Phoenix, propone pensar de manera estratégica con respecto a los ahorros. «Actualmente se puede crear una cuenta bancaria en línea con un nombre personalizado», afirma. Etiquetar una caja de ahorro con un objetivo específico es como poner la imagen de una bicicleta o auto nuevo, lo que sea su objetivo, en un chanchito. Cada vez que lo vea, sabrá para qué es el dinero y será mucho más difícil sacar algo.
2. Páguese a usted mismo primero
Ya sea que esté ahorrando para la jubilación, una laptop o un auto, existe un concepto sencillo que puede optimizar y agilizar las cosas: pagarse a usted mismo primero. Esto significa que cuando recibe su salario, automáticamente destina un porcentaje determinado a una cuenta de ahorros y luego usa el resto para necesidades y deseos. Revise el porcentaje cada seis meses para asegurarse de que sea el monto correcto.
3. Ahorre para emergencias
Sí, lo sabemos, no es la meta más apasionante. Pero según una Encuesta nacional de confianza financiera de Truist 2020, el 58% de los estadounidenses tiene menos de $1,000 ahorrados para emergencias.Divulgación 1
Ahorrar puede ser difícil, especialmente cuando los ingresos son pocos, pero la popular regla de presupuesto de 50/30/20 puede ser una buena guía: gaste el 50% en necesidades, el 30% en aquello que desea y ahorre el 20%.
Puede resultar útil ahorrar tres meses de costos de vida en una cuenta solo para emergencias. Si eso no fuera posible debido a su situación actual, ahorrar al menos $1,000 es una excelente manera de comenzar.
Vivir sin un fondo de emergencia tiene un costo oculto también: el daño que puede causar en su salud mental. Implementar un plan y ahorrar según un cronograma, aunque sea un poquito cada mes, puede traer tranquilidad.
4. Haga pequeños sacrificios
A menudo, las personas intentan seguir un enfoque de todo o nada cuando se trata de metas de ahorro. "Los extremos nunca funcionan", afirma Repak. "Con cualquier tipo de meta importante, muchas veces nos sentimos derrotados".
En vez de decirse que no podrá pedir comida para llevar nunca más, Repak recomienda aplicar cortes razonables a pequeños puntos de su presupuesto. Por ejemplo, puede decir, «"Voy a empezar a llevarme el almuerzo al trabajo"», sostiene. «Se trata de renunciar a pequeñas cosas». Podría ser reducir dos servicios de transmisión de contenidos a uno, o andar en bicicleta en vez de llenar el tanque.
Klein comenta que sus clientes logran reducir el presupuesto de maneras sorprendentes, ya sea utilizando aplicaciones que les ayudan a obtener cupones o recortando gastos recurrentes innecesarios. Renegociar (o eliminar) cargos por servicio de cable premium e Internet de alta velocidad es otra manera de recortar costos mensuales, afirma Klein.